“Hasta que no te sientas cómodo estando solo, nunca sabrás si estás eligiendo a alguien por amor o por soledad” *Sócrates*.
La palabra soledad, nos la muestran como algo triste, como un abandono, una muerte, y no siempre es así.
En la soledad podemos conocernos a nosotras mismas. Nos da miedo la palabra soledad; nuestra cultura tiene una gama de palabras hasta para hacernos sentir culpables de estar solas.
¿En verdad estamos solas? En momentos requerimos tiempo con nosotras, tiempo para escucharnos, descubrirnos, reinventarnos y mientras permanezcamos acompañadas de personas, podemos ser influenciadas a sus creencias, vivencias etc. No es fácil, estamos tan acostumbradas a darnos a los demás, que no sabemos estar con nosotras mismas. ¿Cuántas veces te vas sola al cine? ¿Cuántas veces te vas sola a un restaurante? Y así podríamos hacernos varias preguntas.
Amigas, las que somos madres y se dedican tiempo completo a ello, llegan a sentir un vacío cuando las / los hijos comienzan a crecer. Cuando nos sentimos que ya no hacemos falta, no sabemos estar con nosotras mismas, por un rato decimos “que a gusto”, pero cuando pasa el tiempo y vivimos esos tiempos vacíos que ya no estamos ocupando por las y los demás, nos llega a dar depresión, por lo que se llama NIDO VACIÓ.
Les hago la invitación que no se asusten, la soledad no es estar sola, es estar contigo misma y si no puedes llegar a verlo así, seguramente no te ves a ti misma.
Ustedes saben ¿Dónde hay un documento que diga que siempre tenemos que estar acompañadas? ¿Dónde dice que tenemos que tener una pareja? Si bien, es cierto, que el ser humano somos seres sociales y sexuales, (ya escribiré sobre la sexualidad de las mujeres).
Les comparto desde mi experiencia, yo fui madre tiempo completo y ama de casa. Un buen día mi vida cambió, estudié, empece a trabajar, tengo proyecto de vida; por lo que tuve que acostumbrarme a estar conmigo, hasta que llegó el momento que ahora me disfruto, amo lo que hago y soy responsable de mí misma.
Los seres humanos a través de nuestra historia repetimos patrones de conducta, es por lo que culturalmente estamos educadas bajo estos pensamientos, tan arraigados que hasta culpa de disfrutarnos nos llega, muchas mujeres van por la vida en busca de amores, sin tomar en cuenta que caemos en relaciones tóxicas y preferimos quedarnos con tal de no estar “SOLAS”.
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