¿Te ha pasado que no tienes hambre, ya no disfrutas la comida o todo lo que comes te causa un malestar?, a veces, ya no sabes ni que comer; es porque la comida que estás ingiriendo no es la que tu cuerpo necesita para vivir y está haciendo un daño en vez de un beneficio.
La trofología significa –trofo- “alimento” y –logia- “estudio, tratado o ciencia”, en pocas palabras “el estudio del alimento”. El termino es acuñado por Nicolás Capó, quién fue el primer trofólogo de nacionalidad española con ideas de medicina natural. Debido a sus ideas, fue sofocado hasta terminar preso en el campo de concentración Naclares de Oca (Álava), en el cual se dedicó a sanar a los presos. Al salir, se encontró con la represión de una Guerra Civil, la cual lo forzó a esconder sus escritos hasta que 85 años más tarde, son recopilados en la primera edición de su libro Trofología Práctica y Trofoterapia.
La trofología nace bajo la pregunta ¿Cómo estar en el mejor estado óptimo de salud? entre un grupo de médicos especializados en alimento para la salud. El mayor desafío al que se enfrentaban era saber qué comer para estar en salud, obteniendo como conclusión que eliminar alimentos como en otros regímenes alimenticios no era la solución debido a la persistencia de enfermedades.
La Trofología es un régimen alimenticio, se enfoca en dar el alimento que el cuerpo necesita en ese momento, ya que no todos los cuerpos se encuentran en el mismo estado de salud y no todos los cuerpos necesitan el mismo tipo de alimento por sus actividades cotidianas; eliminando de esta forma síntomas o padecimientos. Es un buen complemento de la medicina, sobre todo para limpiar el cuerpo, obtener un mejor efecto de los medicamentos y protegerlo en caso de algún tratamiento con efectos secundarios para el mismo.
Los trofólogos al paso del tiempo descubren que influyen otros factores de la vida cotidiana en la salud, los cuales pueden llevar el cuerpo a la enfermedad como las emociones, los químicos, los tóxicos, la contaminación, la comida altamente procesada, el sedentarismo, entre otros. Gracias a este descubrimiento se complementa el estudio de la trofología con estudios en diversas industrias como del higiene personal, cosmética, limpieza, alimentaria, agrícola, farmacéutica, entre otras. Gracias a estos estudios básicos los trofólogos fungen como un primer filtro para derivar al asesorado con un especialista en caso de ser necesario.
Trof. Karla Peña
Redes sociales @TrofologiaGdl
Cel. 331 410 3478
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